La halitosis, nombre técnico que se le da al mal aliento, se produce por diferentes factores pero el 90% de los casos son de origen bucal debido a una mala salud dental. Otros, derivan de problemas gastrointestinales o el consumo de algunos medicamentos, tabaco o alcohol.
Existen algunas formas simples y que resultan muy eficaces para controlar o eliminar el mal aliento. Clínica Everest aconseja visitar al dentista periódicamente, mantener una buena higiene bucodental, llevar una dieta saludable y consumir mucha agua.
Visitar al dentista
La recomendación es visitar al dentista al menos 2 veces al año. De esta manera el especialista podrá controlar tanto la salud como el nivel de la higiene bucodental y así, realizar un diagnóstico y él o los tratamientos necesarios para mejorar cualquier enfermedad existente o realizar una limpieza profesional para eliminar el sarro y la placa bacteriana, todos causantes del mal aliento.
Correcta higiene bucodental
La mejor herramienta, en casa, para evitar el mal aliento es realizar un correcto cepillado de dientes, al menos 3 veces por días. Así, se eliminarán los restos de alimentos que quedan entre o sobre los dientes y que provocan mal aliento. La higiene se puede reforzar con el uso de otros productos existentes en el mercado y que son de gran ayuda, entre ellos, el hilo dental, cuya principal función, es alcanzar aquellos rincones más complejos de la boca hasta donde el cepillo no puede llegar, eliminando todo aquello que queda en la boca tras el cepillado. Por último, el enjuague bucal reforzará las posibilidades de eliminar el mal aliento.
Una dieta saludable
Para evitar el mal aliento producido por restos de alimentos que queden en los dientes, los consejos antes mencionados serán de gran ayuda, al igual que comer una manzana cuyo efecto “lija”, ayuda a eliminar restos de comida. Cuando la halitosis proviene del área gastrointestinal, evitar el consumo de ciertos alimentos ayudará a evitar su aparición, es por ello que eliminar o disminuir de la dieta las cebollas, ajos, condimentos muy fuertes o el alcohol, será muy importante. Lo mismo pasa con el tabaco.
Consumir mucha agua
Beber al menos 2 litros de agua, diariamente, evitará que la boca se seque y ayudará a arrastrar las partículas de comida que queden en los dientes, lengua y algunos rincones de la boca, evitando la aparición del mal aliento.
El mal aliento resulta ser una situación muy incómoda para quienes lo padecen acarreándoles, incluso, problemas sociales, es por eso que Clínica Everest invita a seguir estos consejos y visitar al dentista para realizar controles y, especialmente, una limpieza dental profesional que asegurará una profusa higiene bucodental que dará la seguridad de que el mal aliento está bajo control.